Convento de los dominicos, que estaban en Salamanca al menos desde 1229 (quizá desde 1222).
Además de su relación con la Universidad de Salamanca, en 1299 se le concedió la categoría de Estudio General, para poder enseñar a los estudiantes de la orden y conferirles grados académicos.
Los libros de este convento llegaron a la Biblioteca Universitaria debido a la desamortización, a partir de 1835.
Varias son las marcas de propiedad que aparecen en los libros. Hay algunas anotaciones de procedencia explícitas: «Ex bibliotheca conventus S. Stephani Salmanticensis Ordinis praedicatorum» (BG/14664); «Atinet ad conventum Sancti Stephani Salmanticensis» (BG/34135); «Libreria de S. Estevan» (BG/39984). A veces, consta también quién lo donó al convento: «Pertenece a la librería del Convento de Sn. Esteban de Salamanca; diole el p. lector Fr. Pedro Olayzola» (BG/4229).
En muchos casos consta el registro de entrada en la biblioteca, con la firma del bibliotecario o maestro de estudiantes encargado y la fecha: «Aplicose a esta Libreria de Sn. Estevan de Salamca. Fr. Juan Hernandez Biblioteco.» (BG/19144). Entre estos han aparecido: Gonzalo Fuertes, Juan de Sandoval, Francisco González, Carlos Lozano, Juan Hernández, Tomás de la Mata, Juan Zenjón, Antonio Montero, Domingo Fernández Feijoo, Juan de Araya. Además de la biblioteca general, debía de haber depósitos de libros en otras estancias: «Este libro del Philosopho pertenece a la celda del celador del dormitorio alto del Noviciado de San Esteban de Salamanca» (BG/51690).
Sin embargo, el indicio más frecuente de la pertenencia a este convento es una antigua signatura, que suele aparecer en la portada, con la estructura: «Numº _ Seno _ Littª _». Estas signaturas se corresponden con las que aparecen en el catálogo del convento, redactado en el siglo XVIII, conservado en el Manuscrito 565 de la Universidad de Salamanca.
Hay algunos otros rasgos característicos: autor y título rotulados en corte frontal, dentro de una cartela decorada; las ediciones antiguas, en encuadernación de piel sobre tabla, suelen tener una etiqueta en cubierta con indicación de autor y título (vg. 12008, 34568, 3365, Inc. 35). En algunos libros con explícita procedencia del convento, la encuadernación está adornada, en el centro de las cubiertas con el escudo de la orden (si bien esto no puede ser indicativo, sin más, de esta procedencia) (BG/41949, con las signaturas del convento).
Ramón Hernández Martín, «El Convento y Estudio de San Esteban», en Luis E. Rodríguez-San Pedro Bezares (coord.), Historia de la Universidad de Salamanca. I, Trayectoria histórica e instituciones vinculadas, Salamanca: Ediciones Universidad de Salamanca, 2002, págs. 589-612.
María Paz de Sena, «Los libros del convento de San Esteban en la Universidad de Salamanca», Archivo Dominicano, 12 (1991), 133-277; 14 (1993), págs. 377-402.
Agustín Vivas Moreno, «La biblioteca del convento de los Dominicos de San Esteban de Salamanca en el Siglo XVIII», Revista general de Información y documentación, 10 (2000), págs. 71-103.